Las bajas laborales por depresión dejan sin
policía de barrio al Marítimo y Ruzafa
El Consistorio paliará las
deficiencias en las áreas más conflictivas con una unidad
suplente
Las bajas laborales por depresión
fundamentalmente han dejado sin policía de barrio a dos de
las zonas con mayor índice de delincuencia de Valencia,
Marítimo y Ruzafa. El Ayuntamiento, consciente de la
situación, creará una unidad de suplentes e investigará las
elevadas dolencias que sufren el 6% de la plantilla total.
CAROLINA FERNÁNDEZ/VALENCIA
Los barrios con mayor índice de delincuencia,
el Marítimo y Ruzafa, carecen desde hace unos meses de
policía de barrio debido a las bajas laborales que se suceden
constantemente en la plantilla de la Policía Local.
El porcentaje de bajas, un 8% según denuncia el PSPV y un 6%
según el propio concejal de Policía, Miquel Domínguez se
generan fundamentalmente por depresión, ansieda, aunque
también las hay por dolencias en espalda o en extremidades
inferiores. “Somos conscientes de este problema, no obstante
somos el Cuerpo con menor índice de bajas del Ayuntamiento,
la EMT la superan con creces”, matizó ayer el concejal de
Policía.
Los vecinos son los primeros que no cesan de denunciar estas
ausencias, que a su juicio están contribuyendo a incrementar
el número de delitos. Es por ello que Miquel Domínguez ha
decidido atajar el problema de raíz . “Vamos a crear una
unidad de refuerzo para que siempre haya agentes suplentes y
nunca los barrios se queden sin policía”, indicó Miquel
Domínguez.
Esta unidad especial tendrá una función exclusiva y no
realizará otro cometido que el asignado, porque otro de los
problemas que se sucedían era que había días que los
agentes hacían labores de policía de barrio y otras
patrullaban la calle. “Pretendemos que los barrios siempre
estén atendidos y los vecinos puedan recurrir a ellos en todo
momento”, comentó Domínguez.
El concejal, sin embargo, asegura que van a supervisar
personalmente cada una de las bajas laborales para controlar
la veracidad de las mismas. “Es complicado comprobar si a
una persona tiene la dolencia que asegura. Pero desde luego
vamos a estar muy vigilantes y abrir expedientes en cuanto
detectemos una dolencia falsa”, señaló el responsable de
la Policía Local.
La concejal socialista Vicenta Lloris señaló, por su parte,
que la actuación policial en los barrios es insuficiente y
existen enfrentamientos entre los propios agentes. “Hasta
ahora el policía de barrio no trabajaba en fines de semana y
eso provocaba un malestar entre los que sí que trabajaban”,
matizó Lloris.
La concejal también afirmó que la falta de seguridad se ha
comprobado en la propia central de Policía donde hace apenas
unos día una persona burló “la escasa seguridad que hay y
robó una pistola de reglamento. Si no tienen control en la
central ¿cómo lo van a tener fuera?”, matizó Lloris.
La bajas laborales y la falta de motivación de los agentes
también se está comprobando en las comisarías de la
Policía Nacional donde es muy complicado realizar una
denuncia. Los agentes aseguran que no tienen personal
suficiente para tramitarlas y emplazan a los denunciantes a
esperar horas, lo que acaba agotando su paciencia y desisten
de su intento. “El verdadero problema es que los agentes
tienen orden de convencer a los denunciantes para que en vez
de denuncia impongan una falta”, matizó Lloris.
La concejal añadió que otra de sus técnicas para reducir
las denuncias es cansar a los denunciantes con largas esperas.
“Así pueden dar estadísticas positivas, cuando los delitos
siguen creciendo”, concluyó.
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