Una ciudad silenciosa. Esta
es la premisa que el Ayuntamiento ha utilizado
para elaborar la nueva ordenanza contra el ruido
que desde hace un año se está redactando y cuyo
borrador ya está en manos de los tres grupos
municipales.
Una de las novedades que se
estudia es prohibir tirar petardos en la calle
fuera de las zonas autorizadas a las comisiones
falleras. La medida, por tanto, permitirá a los
policías a sancionar con una multa leve de unos
60 euros a quien tire un petardo en la vía
pública.
El Ayuntamiento es consciente
de que durante las Fallas será complicado que
los valencianos cumplan esta ordenanza, pero la
intención es lograr concienciar al ciudadano,
según indicaron fuentes cercanas al proyecto de
normativa.
Esta medida también se
aplicará para cualquier celebración como bodas,
comuniones o cumpleaños con el fin de evitar que
los vecinos que viven junto a iglesias puedan
descansar y dejen de escuchar cada semana
pequeñas mascletaes.
La nueva ordenanza es muy
amplia y abarca a 14 áreas en las que el ruido
está presente en la ciudad.
Los policías tendrán más
potestad para actuar ante una denuncia. Hasta
ahora, el agente lo único que podía hacer era
tramitarla, pero ahora podrá clausurar una
verbena o un local en el mismo momento. El
objetivo es agilizar la tramitación de los
expedientes y actuar cuando se esté produciendo
el ruido. Para ello, los policías irán provistos
de sonómetros con el fin de medir el nivel del
ruido.
Los agentes podrán retirar un
vehículo si la alarma está sonando de manera
continuada y un vecino avisa para denunciarlo.
Los camiones de la basura
también tendrán que reducir el ruido al igual
que la maquinaria que se utiliza para baldear
las calles.
La ordenanza prevé que los
edificios cuenten con la máxima insonorización y
los aparatos de aire acondicionado estén
colocados de forma que no molesten al
vecindario.
Las zonas de ocio han sido
una de las batallas que más han enfrentado a
vecinos y hosteleros. Para estos casos la
ordenanza prevé medidas correctoras como el
corte de calles antes de que se llegue a la
medida extrema como es la de declarar una área
ZAS, tal y como se encuentra la plaza Xúquer y
desde este mes la zona de Woody.
Prohibición de conciertos
Los conciertos tampoco se podrán celebrar en
la calle si no se realizan en los enclaves
previamente autorizados por el Ayuntamiento como
Viveros, en un futuro el parque de Cabecera o el
puerto. Pero ya no se podrán celebrar en la
calle como se hacía antes.
Las Fallas serán una
situación excepcional y las verbenas se podrán
celebrar, siempre respetando los 90 decibelios.
La ordenanza prevé que las verbenas que superen
este ruido a partir de un perímetro de cinco
metros serán multadas. En el resto de fiestas
locales o de barrios también se podrán celebrar,
pero respetando los 90 decibelios.
El borrador de la ordenanza
fue entregado ayer para su estudio y que se
presenten las propuestas antes de su aprobación
inicial, para lo que se prevé el pleno del
próximo mes.
cfernandez@lasprovincias.es