La genial maestría de los
artesanos Julio y Julio Sergio Monterrubio,
padre e hijo, ha llevado a la comisión de Nou
Campanar a repetir por cuarto año consecutivo el
primer premio de la sección Especial Infantil,
bajo el lema de ‘Unes falles la mar de salades’,
toda una delicia de monumento infantil que ayer
recibió los primeros aplausos del público que
enterados de la noticia invadieron la
demarcación.
La victoria corrió como la
pólvora nada más leer el acta del jurado el
concejal de Fiestas, Félix Crespo. La comisión,
que siguió el acto a través de los móviles,
irrumpió en gritos de alegría en plena calle.
Inmediatamente los
alrededores de la falla se fueron llenando de
gente, mientras el pirotécnico preparaba un
castillo de fuegos artificiales para festejar la
noticia, que era compartida por la fallera mayor
infantil, María Benlliure Moscardó, y el
presidente infantil, Carlos Castellets Alberó,
al que falleros y amigos no cesaban de besar y
abrazar.
El presidente de la comisión,
Juan Armiñana, mostraba su satisfacción y
felicitaba a los infantiles que rápidamente
abrieron las vallas para que todos rodearan a la
falla ganadora y pudieran hacerse las
fotografías para el recuerdo.
“Estamos muy satisfechos. Es
el cuarto año que logramos el primer premio”,
dijo Armiñana, al que en pocos minutos rodeó la
gente y varios presidentes de comisiones
falleras para felicitarlo. “Tenemos la suerte de
contar con unos artistas que se vuelcan con la
falla y nosotros con ellos”, destacó.
Juan Armiñana, mucho más
relajado, también tuvo un recuerdo para un buen
amigo como fue Juan Escriche, de la falla plaza
del Pilar, y dijo: “Con mucho cariño le dedico
este triunfo a él, que esté donde esté seguro
que se alegrará”.
En unos segundos periodistas
y cámaras de televisión invadieron el centro de
la calle donde se alza orgullosa la gran falla
infantil.
¿Dónde están los artistas?
Todos preguntaban por los artistas. Sin
embargo, continuando una habitual costumbre
estos artistas, padre e hijo, nunca se quedan en
Valencia la noche de los premios.
Los artistas Monterrubio se
han volcado de nuevo con toda su sabiduría y
experiencia en la pequeña falla en la que con
una gran imaginación han trasladado el mundo de
la fiestas fallera al fondo del mar.
Los actos que integran el
programa fallero tiene en la falla su lugar. La
despertà y la mascletà, así como la ofrenda de
flores y otros más están representados por
caracolas, así como la fallera mayor y su corte
de honor, todo una belleza de sirenas.
En resumen, Julio y Julio
Sergio Monterrubio muestran que las fallas
también se podrían celebrar en el fondo del mar
siendo protagonistas todo una curioso y
simpática fauna marina.
Con las calles llenas de
público con ganas de contemplar una deliciosa
falla infantil en la que la composición,
modelado y pintura han sido base para alzarse
con el primer premio, llegó un microbús con la
fallera mayor infantil de Valencia, Inmaculada
Escudero, y las componentes de su corte de
honor.
La embajada fallera llegaba
para felicitar a la comisión infantil y muy en
especial a su fallera mayor y presidente que
rápidamente acudieron a su encuentro.
Besos y felicitaciones y,
sobre todo, fotografías muchas fotografías para
que quede testimonio gráficas de la noche de la
visita y del premio conseguido.
Juan Armiñana hizo de maestro
de ceremonias, junto a su vicepresidente Julio
Torras, a quien momentos antes de que el
concejal de Fiestas, Félix Crespo, leyese el
acta de los premios, la camisa no le tocaba el
cuerpo y no digamos al presidente Armiñana,
aunque estos falleros son de experiencia
demostrada pero cada año se juegan mucho.
maferreira@lasprovincias.es
